DOHA (AP) — Después de completar su peor campaña en una Copa Mundial en más de 40 años, México se restañaba el jueves las heridas. El naufragio del Tri en Qatar cortó una racha de siete clasificaciones consecutivas a la segunda fase. Tardaron 317 minutos en marcar gol en el Medio Oriente y 431 contando los encuentros que cerraron su participación Rusia 2018, y por diferencia de goles se quedaron fuera de los octavos de final que habían sido su techo histórico en Copas del Mundo fuera de casa.
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“El equipo se entregó, metió y creamos oportunidades y pudimos hacer más goles, pero no estuvimos finos, es una lástima porque el equipo sudó”, dijo el portero Guillermo Ochoa, quien disputó su quinto Mundial. La primera eliminación mexicana en fases de grupo desde Argentina 1978 abre el espacio para un análisis del proceso mundialista mexicano.
¿QUÉ FUE LO QUE FALLÓ?
México careció de goles en gran medida porque Martino insistió a rajatabla con un esquema 4-3-3 que no tenía los volantes interiores en óptimas condiciones para generar peligro. Andrés Guardado y Héctor Herrera, las dos piezas fundamentales en esa formación, ya no tienen la profundidad de llegada de otros años. La dinámica de México mejoró con el ingreso de Luis Chávez.
No es coincidencia que el jugador de Pachuca jugó todos los minutos posibles en Qatar. En partidos oficiales, Martino recurrió a un bloque de cinco zagueros sólo en dos ocasiones. Ante Canadá en las eliminatorias y en la derrota 2-0 ante Argentina en Qatar para tratar de defenderse y contragolpear.
El 4-2-1-2 que usó ante los árabes fue inédito y fue cuando el equipo mejor se vio en ataque. “Los que jugamos somos nosotros y en el segundo partido no entendimos mucho lo que (Martino) quiso plantear”, dijo Chávez. “Nos defendimos bien, pero no generamos peligro y así no se pueden hacer goles y terminamos perdiendo el partido”.
El mismo Martino aceptó en rueda de prensa que ese partido ante los argentinos lo planteó mal y que después de aguantar el cero en el primer tiempo debió regresar a su esquema habitual para buscar atacar más.
¿QUÉ HAY QUE CORREGIR?
En el Mundial de Qatar quedó evidenciado que en México faltan jugadores que resuelvan partidos. Escasean los centro-delanteros y volantes creativos. El trasfondo de eso probablemente tiene que ver con el torneo local, donde esos puestos generalmente los ocupan jugadores foráneos o no nacidos en el país. Martino habló de ese problema a lo largo de sus cuatro años, pero nada cambió.
Luego de la eliminación, el entrenador argentino no quiso dar detalles sobre los males del fútbol mexicano. Dijo que entregará un informe a los dirigentes de la Federación Mexicana, y que ellos sabrán si lo dan a conocer. “Lo que he visto lo he hablado con el presidente (de la federación Yon de Luisa) y ha sido motivo de muchas reuniones, no por el futuro cercano (del Tri) sino del lejano”, dijo Martino.
“Lo prudente es que el reporte lo tengan quienes son los encargados de modificar algo del futuro del fútbol mexicano. Exponerlo hacia fuera sería acrecentar un debate que no sé si revestirá algo”. Además de la abundancia de extranjeros, Martino ha dicho que es necesario que más jugadores mexicanos vayan a Europa. De la plantilla actual, sólo nueve juegan en ese continente. En Rusia 2018, México acudió con 12.
¿QUÉ SIGUE?
Primero que nada, México debe buscar nuevo técnico de cara al Mundial de 2026, al que se clasificó automáticamente por su condición de anfitrión junto con Canadá y Estados Unidos. Martino confirmó que su contrato con la selección concluyó con el silbatazo final ante Arabia Saudí y que por el pobre resultado difícilmente cree que lo consideren para seguir al frente.
“No creo que la decisión de traer a Martino haya sido mala, si ves su currículum es bueno”, dijo a The Associated Press Miguel Herrera, técnico del Tri en Brasil 2014 y analista de la cadena estadounidense Telemundo. “La idea era que viniera a mostrar otras cosas y que diera el golpe de calidad que no se dio, pero no fue mala apuesta en realidad”. ¿Candidatos? El “Piojo” Herrera y Jaime Lozano son los mexicanos que más suenan.
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Lozano estuvo al frente del equipo Sub23 que se llevó el bronce en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. También se barajarían nombres de extranjeros. El uruguayo Guillermo Almada ha cobrado fuerza tras sacar campeón a Pachuca en el último torneo Apertura. Y el argentino Mauricio Pochettino, de reciente paso con el Paris Saint-Germain, ha entrado en la discusión.
Después de quedar fuera en Rusia 2018, los dirigentes apostaron por la continuidad del colombiano Juan Carlos Osorio, quien declinó la oferta. De Luisa no ha dado declaraciones después de la derrota para conocer los planes. “No por un resultado se debe juzgar si estamos avanzando o no, hay cosas buenas que se están haciendo, es un error cada cuatro años que se acaba un proceso y empiezas otro de cero”, dijo Ochoa. “Eso es un error y por experiencia no lo debemos hacer”
LO BUENO
Dentro del golpazo que representa quedar fuera en un Mundial en primera fase luego de avanzar siete veces consecutivas a la segunda, el proceso de Martino cumplió parcialmente con el recambio generacional que era urgente. Aunque en Qatar los mexicanos tuvieron a dos jugadores disputando una quinta Copa del Mundo por primera vez — Ochoa y Guardado — y tuvieron al jugador más veterano del torneo en Alfredo Talavera, 16 de los 26 citados jugaron un Mundial por primera vez.
Jugadores como Jorge Sánchez, César Montes, Kevin Álvarez, Carlos Rodríguez y Chávez pudieron disputar sus primeros minutos y seguramente serán fichas esenciales para 2026. “Hay jóvenes que dieron un paso al frente, ahora hay que guiarlos, especialmente porque no habrá eliminatoria y sólo con la Copa de Oro no va a bastar”, dijo Ochoa. “Yo hablé con ellos, les dije que no cualquiera puede vivir una Copa del Mundo y que somos afortunados por estar acá”.