Quien conoce a los demás posee inteligencia; quien se conoce a sí mismo posee clarividencia. Quien vence a los demás posee fuerza, quien se vence a sí mismo es fuerte”.
Lao Tsé
El director técnico de la selección dominicana, Néstor -Che- García, volvió a demostrar anoche que es un gran estratega y tiene pleno control de sus jugadores.
El Che García se mostró muy emocionado con la gran ovación que le brindaron de pie los miles de fanáticos y dijo. “Me siento muy bien por la convocatoria”.
Indicó que se siente satisfecho con el trabajo que se está realizando con miras a la Copa Mundial de Baloncesto y resaltó la defensa de sus jugadores.
Al comentar que el equipo dominicano tenía una ventaja de 20 puntos en un momento y que la escuadra de la Universidad de Memphis se acercó a tres puntos, justificó diciendo que los muchachos se relajaron al ver que el juego estaba de un solo lado.
El Che ha señalado en otras entrevistas que está trabajando fuertemente para evitar que sus atletas bajen la guardia y que se mantengan todo el camino con la misma intensidad y buena defensa.
El propio Che
Luego del encuentro tuve un interesante diálogo con el capataz del equipo nacional y le pregunté cómo había logrado la disciplina y el pleno control de sus jugadores y me escribió de puño y letra lo siguiente:
“Leo, creemos en lo que hacemos, porque sabemos y sentimos que tenemos todo el país detrás apoyándonos”.
Uribe
Rafael Uribe, presidente de la Federación Dominicana de Baloncesto, agradeció la asistencia de los fanáticos y el apoyo del Banco de Reservas, patrocinador principal de la selección nacional y de otras instituciones.
Ponderó el equipo de trabajo de la selección nacional y los directivos de la Fedombal, “Hay que laborar muy duro para que todo salga correctamente”. Señaló.
José Monegro y Junior Páez, quienes pertenecen a la gerencia colegiada y dirigente de Fedombal, dijeron: “Ha sido un gran espectáculo. Los fanáticos se lo merecían»
Minuto
Antes de iniciarse el partido se guardó un minuto de silencio por el fallecimiento de doña Hilda Gómez, madre del Che García.
Hasta mañana si Dios quiere, dominicanos.