El Instituto Tecnológico de Santo Domingo (Intec) presentó los resultados preliminares de un proyecto para la producción de un biol, abono orgánico líquido, a partir del sargazo que llega a las playas de República Dominicana, para su uso en la agricultura familiar.
La academia ejecutó el proyecto en cultivos de banano junto a la Asociación de Agricultores de Banano Ecológico de la Línea Noroeste (Banelino) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés).
Durante la presentación, los desarrolladores del proyecto manifestaron que los biol que tienen como materia prima principal a las macroalgas marinas se consideran recursos valiosos para la mejora de las plantas debido a su alto contenido de macronutrientes, polisacáridos, glicerol y reguladores de crecimiento.
La investigación determinó que la obtención de un biofertilizante líquido a partir del sargazo por fermentación “es factible técnicamente y reproducible”, a la vez que resalta que en el bioles de sargazo se identificaron hongos, levaduras y actinomicetos beneficiosos para los suelos agrícolas.
En ese sentido,Gustavo Gandini, Agrónomo especializado en control biológico de la Banelino dijo que “yo entiendo que el sargazo tiene muchas cosas positivas. Es una opción, hay que seguir investigando y no considerarlo un problema, sino que es un beneficio para nuestra agricultura”.
Gandini indicó que tras ver la aplicación del biol del sargazo en plantas de banano, realizaron monitoreo de las plantaciones, “porque el banano es uno de los cultivos que tiene más parámetros para poder evaluar la producción por el tema de mercado; es una planta perenne que produce todas las semanas y todas las semanas se envía hacia Europa y Estados Unidos”.
El agrónomo manifestó que el abono orgánico presenta otras ventajas como la biodefensa de la planta, cualidades agrícolas del suelo, es decir, “que cuando se riega donde se aplicó el sargazo, hay mayor retención, pero sin encharcamiento”, según Diario Libre.
De su lado, el coordinador del doctorado en Ciencias Ambientales del Intec, Ulises Jáuregui-Haza, informó que, a raíz de los primeros resultados de la investigación, desarrollaron dos lotes de un metro cúbico del bioles de sargazo, en la unidad de producción del abono en Banelino.
“Ya estamos trabajando en una escala de carácter industrial”, añadió.