Un hombre inteligente es aquel que sabe ser tan inteligente como para contratar gente más inteligente que él”.
John F. Kennedy
“En un hombre honrado hay un fuerte baluarte”.
George B. Lytton
Análisis, emociones, expectativas y una enorme presión, serán parte de la Gran Final de la NBA.
Los protagonistas serán los Warriors de Golden State y los Celtics de Boston. Son dos escuadras de mucha tradición en el mejor baloncesto del mundo.
Miles de dominicanos estarán pendientes desde mañana a la final que inicia a un 7-4, entre estos dos colosos que han llegado para disputar el título de la NBA, sobre la base de grandes sacrificios y una sobrecarga de tensión en jugadores, entrenadores y asistentes.
No fue fácil llegar a esta fase. Ambos equipos tuvieron que vencer muchos obstáculos.
Expertos y periodistas
Los expertos analizan con mucho cuidado antes de ofrecer sus vaticinios, al igual que los periodistas analistas de la NBA.
Aunque la balanza se inclina más al lado de los Warriors, nadie se atreve a descartar por completo a los Celtics. Al contrario, comentan que los jugadores de Boston tienen hambre de ganar y garras para poder derrotar a los pupilos de Steve Kerr.
Lo que no se pone en duda es que la Gran Final podría traer sorpresas, como suele pasar, especialmente en las finales.
Siempre aparece el factor que nadie estaba esperando. Y eso es lo que llamamos sorpresa.
Warriors
El fuerte trabuco de Golden State tiene jugadores de alto quilate ofensivo.
Estarán en el tabloncillo a Stephen Curry, Klay Thompson, Draymond Green, Andrew Wiggins y Jordan Poole. Eso es algo muy comprometedor para la defensa de los Celtics.
Los analistas dan mucho crédito a la defensa de Boston y comparto ese criterio.
Claro, los chicos de los Warriors han demostrado que en una “picada de ojo”, encestan desde todas las posiciones y son letales en tiros de tres. Curry, Thompson, Pool, y Wiggins, son “asesinos” en momentos apremiantes del partido.
Experiencia
Un gran valor agregado para los Warriors, es la experiencia de haber estado en estos escenarios con algunos de esos jugadores. Se conocen hasta por el sonido de sus pisadas en el tabloncillo.
En las últimas ocho temporadas, Golden State ha estado en la Gran Final seis veces, por lo que deben manejar mejor que Boston el factor presión.
Celtics
Los chicos de los Celtics de Boston van a la final con una enorme motivación y una indiscutible unidad. Quieren conquistar el trofeo de campeón a como dé lugar.
Ellos saben lo que significa vencer a Curry, Thompson y Green. Esos tres chicos nunca se rinden y gozan un mundo cuando ganan.
El cuarteto de Jayson Tatum, Jaylen Brown, Al Horford y Marcus Smart, tienen las herramientas y el poderío ofensivo y defensivo para hacer estragos a sus contrarios, que no podrán descuidarse ni un segundo, para que luego no vengan las excusas.
Williams lll
El “Marchante” que suscribe se inscribe entre los quw piensan que Robert William lll podría ser una pieza de primer orden en las aspiraciones de los Celtics.
William lll ha demostrado tener poder debajo de los tableros para complicarle la situación a Golden State en esa zona de la cancha, además de que puede aportar en la ofensiva.
Si el espigado jugador de los Celtics se faja a defender y tomar rebotes, los campeones del Este estarán en la pelea de tú a tú.
Tatum
El gladiador Tatum tendrá que concentrarse al máximo. Debe evitar entrar en polémica con los árbitros y jugar su mejor baloncesto de la temporada, para que ponga a su equipo a competir con unos contrincantes que sí saben como “le entra el agua al coco”.
Tatum es un encestador natural y cuando viene conectado al aro es imparable. Es de los atletas que le gusta ganar y es una fiera a la hora de penetrar.
Brown
Los seguidores de los Celtics dan la vida para que Brown, quien es un tremendo jugador, no se exceda en el drible, pues muchas veces pierde el balón en momentos cruciales.
Jaylen es un buen encestador, con habilidades para penetrar, es guapo y defiende, pero le encanta driblear en situaciones que requieren calma.
Horford
El dominicano Al Horford, un “niño mimado” y aclamado por los fanáticos de Boston, por su gran juego defensivo y su valentía frente a robustos y veteranos jugadores, tendrá muchos ojos puestos en él, pues sus compañeros le han dado la condición de líder en el grupo. No lo digo yo, lo dijo Tatum.
Lean este breve comentario que nos llegó sobre el dominicano y que confirma lo que expresamos;
“Al Horford sigue siendo el líder de los intangibles, el que hace siempre todo bien en el momento preciso”.
Me produce satisfacción leer esos elogios sobre un compatriota.
Hasta mañana, si Dios quiere, dominicanos.
Ime Udoka, el piloto de los Celtics de Boston