Juan Bancalari, presidente de la Asociación Dominicana de Marinas Deportivas y Clubes Náuticos (ADMC), resaltó que “el turismo náutico tiene la ventaja de ampliar la oferta turística del ‘todo incluido’ y mejorar su calidad”.
Destacó las múltiples opciones que ofrece República Dominicana, desde explorar la Zona Colonial y el Salto de Jarabacoa, en La Vega, hasta avistar ballenas en Samaná o disfrutar del golf en Punta Cana, entre otros.
«Anualmente, al país arriban alrededor de 3,000 embarcaciones (yates, megayates, ‘sportfish’, veleros-catamaranes y lanchas de tránsito), equivalente al 10% de unas 30,000 embarcaciones que cruzan por el Caribe en la temporada alta, la cual se registra durante el invierno en Europa y los Estados Unidos», dijo.
Explicó que de se 10%, con expectativas de duplicarse, según calculan los expertos en el tema náutico, equivaldría a un gasto promedio por embarcación ascendente a US$1,500 semanales. Al mes sería US$18 millones y por cinco meses que dura la temporada son entre US$90 millones y US$100 millones y cerca de US$150 millones sumando el turismo de pesca deportiva en verano con la oferta actual.
El empresario turísticos detalló que el público al que va dirigido este tipo de actividades y vacaciones es muy heterogéneo. Citaron como ejemplo que los que llegan para realizar pesca deportiva suele ir de 40 a 60 años, pero los que arriban en velero en promedio es de 50 a 60 años, aunque llegan con su familia de edades de 25 años o más bajas, según El Dinero.