Desde que inició a entrenar para el que ha sido el combate más importante de su carrera como boxeador, Alfree Ramírez manifiesta que siempre se mantuvo confiado en que se convertiría en campeón nacional.
El pasado fin de semana Ramírez se alzó con el cetro nacional del peso gallo (118 libras) tras vencer a Gabriel Marte por decisión unánime.
“Fue una pelea muy batallada y trabajada, pero gracias a Dios pudimos ganar para tener el título nacional en nuestras manos”, expresó el púgil de pegada fuerte izquierda, quien resaltó que duró cuatro meses entrenando para la pelea.
Con el triunfo, el boxeador de 24 años puso su récord en seis victorias (dos de ellas por la vía del nocaut) y dos derrotas.
Luego de disputar 10 intensos asaltos del combate coestelar de una velada desarrollada en la Cancha Municipal de Higüey, Ramírez se coronó al ser favorecido por las tarjetas de los jueces con puntaje de 100-90, 100-90 y 98-92.
Sensaciones
“Me sentí emocionado cuando vi que ese cinturón era mío, por el esfuerzo grande que se ha hecho para lograrlo”, expresó Ramírez, quien agregó: “Lo primero que hice fue pensar en mi mamá”.
El protegido de Saviel Promotion Boxing, empresa que maneja Saviel Bonilla, aseguró que desde el primer día que empezó a prepararse para el enfrentamiento, se sintió seguro que ganaría.
Ramírez no ocultó que sintió nervios al momento de esperar la decisión de los jueces pero que nunca dejó de pensar en que había ganado.
Clave
El nacido en Guachupita señaló que se apoyó en sus golpes de uppercut, ganchos y jabs para salir victorioso en la cartelera organizada por Sansur Boxing Promotion.
Aspiraciones
Ramírez reveló que aspira en convertirse en campeón mundial e indiscutible. “Con Dios por delante trabajaremos para eso”.
Historia
Alfree, quien es hijo de la señora Cándida Ramírez, apenas llegó hasta el octavo de primaria porque desde los nueve años de edad tuvo que lanzarse a las calles a trabajar para contribuir con el sustento de su familia.
Narró que un día se sintió motivado en practicar boxeo al mismo tiempo que estudiaba y trabajaba, pero que cada vez se le hacía más difícil cumplir con las tres ocupaciones, hasta que decidió apartarse de la escuela. “Me sentía presionado”, expresó el atleta, quien no descarta retornar a los estudios. Aunque manifiesta que su principal meta es dar mejores condiciones de vida a su madre.