”Es mejor acostarse sin cenar que levantarse con deudas”.
George Duhamel
“Yo no creo que las cosas suceden por accidente; más bien uno se las gana”.
Madeleine Albright
No hay que analizar mucho la estrepitosa caída del seleccionado dominicano en el Clásico Mundial de Béisbol.
Simple: Los jugadores criollos no batearon, salvo algunas excepciones.
Las excusas sobran.
La ofensiva se cayó.
La escuadra quisqueyana está de regreso a casa.
Los expertos internacionales y nacionales del Clásico fallaron en sus pronósticos.
Analizaron jugador por jugador y la conclusión era que estaríamos en la final con Japón, o Estados Unidos.
Escuché con asombro cómo algunos colegas culparon a todos los jugadores de la derrota del conjunto nacional.
Y eso no fue así.
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Hubo jugadores que hicieron su trabajo y no es justo meterlos en el paquete de los que no le dieron ni a un coco.
Picheo
Con mínimas fallas, el cuerpo monticular de los dominicanos fue excelente, de acuerdo a mi criterio.
Los relevistas estuvieron a su altura y recibieron los elogios de los técnicos del béisbol que estaban en Miami.
Fallamos en la ofensiva, reitero, y esa fue la causa principal para ser eliminados del Clásico Mundial.
Cortos
Rodney Linares estaba muy molesto anoche con los periodistas dominicanos que cubrieron el Clásico.
Los comunicadores deportivos le entraron anoche a Linares a dos manos, tras la eliminación de su conjunto. No tuvieron piedad para el mánager de los dominicanos.
Me enteré que dos o tres jugadores amenazaron con irse del equipo si no le daban juego, pues son titulares en las Grandes Ligas y estaban relegados en el Clásico.
Los dominicanos que juntaron sus dólares por un año para ir al Clásico, salieron anoche del play que daban pena.
La inversión del seleccionado nacional fue cuantiosa y los resultados muy negativos. Un golpe mortal.
Hay amigos que estaban haciendo colectas para hacer un “sancocho”, si vencíamos a Puerto Rico y nos salió el tiro por la culata. ¡El sufrimiento es grande!
Hasta mañana, si Dios quiere, dominicanos.