La situación del sargazo en la República Dominicana y la región del Caribe es “crítica”, así los consideró de José Reyes López, viceministro de Recursos Costeros y Marinos del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales.
Lo atribuye el aumento de las macroalgas marrones, y que cada vez son más frecuentes, a los efectos del cambio climático por las actividades humanas. La llegada del sargazo afecta el turismo de playa dominicano, el principal motor económico del país caribeño.
“Cada vez más, producto del cambio climático y los cambios que están generando las corrientes, el sargazo está llegando a puntos donde nunca había llegado a nuestra isla”, dijo, al poner como ejemplo que las algas han llegado a Pedernales, Miches y Puerto Plata.
«En su reporte de junio de este año, la academia indicó que la cantidad de sargazo siguió aumentando en el Atlántico tropical, el mar Caribe, el Atlántico centro-occidental, el Atlántico centro-oriental y el golfo de México. En total, con las regiones unidas, la cantidad pasó de 18.8 millones de toneladas en mayo pasado a 24.2 millones de toneladas en junio de 2022, estableciendo un nuevo récord histórico», agregó.
También advirtió, durante la celebración de la Semana del Clima de América Latina y el Caribe 2022, que más sargazo puede ingresar al mar Caribe y al golfo de México en los meses siguientes a raíz de las principales corrientes oceánicas.
Reyes López precisó que como se está convirtiendo en un problema de la región, se lanzará una mesa de trabajo con diferentes instituciones y el apoyo de la Unión Europea. La mesa estaría presidida por la República Dominicana, que busca posicionarse como líder en la región sobre el tema.
Advirtió que se debe actuar rápido con relación al sargazo que está destruyendo la biodiversidad marina a los lugares a los cuales llega, a la anidación de tortugas, a las comunidades pesqueras, obstruyendo los arrecifes de coral y el ecosistema ambiental, perjudicando a las comunidades pesqueras e impactando cada vez más al sector turístico.
El viceministro indicó que las barreras contra el sargazo son colocadas de manera individual en las zonas hoteleras, pero aseguró que se realiza con los lineamientos del Viceministro de Recursos Costeros y Marinos del Ministerio.
Reconoció el trabajo de las barreras, pero advirtió que no son suficientes y que solo detienen una parte de las algas. Contó que, además, se debe abordar el tema de la recolección y la disposición final del sargazo. “Eso no se puede llevar a cualquier vertedero”, precisó.
“Eso es parte de la mesa, no solo evitar que el sargazo llegue, sino la disposición, y también, desde esa mesa tratar de buscarle utilidad alsargazo. Si no le buscamos utilidad, no vamos a acabar con él”, expresó.
De su lado, Andrés Bisonó León, presidente ejecutivo de Sargassum Ocean Sequestration of Carbon o SOS Carbon, consideró que el tema del sargazo se ha agravado por la falta de acciones para enfrentar el problema.
“A nivel de lo que representa el problema en impacto económico, impacto al turismo, impacto al medioambiente, impacto a la salud humana ha sido muy bajo ese nivel de respuesta”, consideró.
Explicó que SOS Carbon, proyecto de investigación del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), desarrolló un mecanismo costo eficiente para la recogida del sargazo en el mar, antes de que llegue a las playas. Aseguró que este modelo minimiza los impactos económicos, ecológicos, de salud humana y ambientales del sargazo.
“Seguimos con un fin de unir a todos los actores para trabajar en equipo y dar la respuesta necesaria a lo que es la urgencia del problema”, expresó Bisonó León.