Joel Santos era el candidato preferido por los hoteleros para ocupar el Ministerio de Turismo tras el triunfo de Abinader en las urnas. Conviene mantener viva la memoria en un país caracterizado por una clase influyente muy olvidadiza. Santos antes que Collado, conste en acta.
Hoteleros de aquí, hoteleros de fuera, familias turísticas de la élite dominicana, notables inversores españoles…Todos apoyaron hasta el último minuto a Joel Santos. Pero Luis se decantó por el ex alcalde por razones nunca contadas o supuestas (influencia de otros poderes fácticos de RD).
Designado Collado, a Santos no se le podía dejar abandonado en la cuneta. Y el hábil presidente lo nombró asesor suyo y le otorgó un alto cargo en una filial de Banreservas. Todos contentos y aquí paz y después gloria.
Joel tenía currículo turístico (no solo por la presidencia de Asonahores) y David (Davicito lo llamaban con recochineo sus oponentes) no tenía la más mínima idea del Sector. Entre uno y otro prevaleció el historial en el PRM del hoy ministro y el apoyo de varios grupos…no precisamente turísticos (pero poderosos).
La salida de Macarrulla ha traído consigo una oportunidad de resarcimiento para Joel con el premio del Ministerio de la Presidencia. Una deuda saldada y otro guiño de Abinader al pujante sector turístico. Un nombramiento recibido con satisfacción por el mundo del turismo y por la clase política.
Santos es en lo personal la antítesis de Collado (también en lo político): recela del protagonismo, huye de las redes (los excesos suelen tener un efecto boomerang) y persigue la discreción y el bajo perfil. A Collado no hay quien le frene en Turismo pero a Santos se le espera con el cariño que desprende su bonhomía y señorío de bien.