Le tomó más de dos meses (no sucedió hasta el 4 de junio, 55 juegos después de su temporada) para que Starling Marte lanzara su tercer jonrón la temporada pasada.
Este año, tomó menos de tres semanas.
El jardinero/bateador designado de los Mets lanzó un jonrón de dos carreras que dio la ventaja en la tercera entrada del miércoles, la número 150 de su carrera y una señal alentadora de un jugador cuyo techo ha demostrado ser alto y cuyo piso ha demostrado ser bajo.
Marte, un All-Star de 2022 y una decepción en 2023 en medio de problemas de lesiones, se parecía más a la versión anterior en una victoria por 9-1 sobre los Piratas para barrer la serie en Citi Field.
Cuando aprovechó una bola curva de Bailey Falter y la perforó aproximadamente 383 pies entre el centro izquierdo y el central, Marte lucía saludable.
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“Me siento bien”, dijo Marte a través del intérprete Alan Suriel después de un bajón en el 2023 en el que lidió con migrañas y las secuelas de una cirugía en la ingle. “El año pasado es un año que quiero olvidar.
Pero a esta altura del año pasado, estaba bien, y un poco después fue cuando comencé a lidiar realmente con eso, ya fueran las migrañas o las cosas con mis piernas.
“Pero ahora mismo me siento muy bien”.
A lo largo de los primeros 18 juegos de lo que espera sea una temporada de recuperación, Marte ha mejorado respecto a la temporada pasada, pero aún no ha alcanzado sus alturas de Juego de Estrellas.
Después de un día de 5-1, Marte, con mucho contacto, está bateando .267 con un OPS de .734, números sólidos, si no excelentes.
Los Mets y Marte pueden sentirse alentados por cómo se siente y, sobre todo, por cómo ha jugado.
Todavía hay preocupaciones con el jugador de 35 años, que no ha tenido un buen desempeño en los jardines y cuya velocidad de sprint ha disminuido.
Marcos W. Sánchez
New York Post
