El vicepresidente de la Asociación de Hoteles y Turismo (Asonahores), Andrés Marranzini, indicó que el sector turístido dominicano trabaja para aumentar los pasajeros de América Latina ante una baja de turistas desde Europa.
“Hay algunos vuelos que se nos han cancelado procedente de Europa y para compensarlo estamos trabajando para aumentar los pasajeros de América Latina”, agregó, según El Dinero.
A lo que el directivo se refiere es que RD no figura en la programación de Air France para vuelos en la próxima temporada de verano; además Corsair anunció que tanto en verano como en la temporada de invierno de 2023 y 2024 dejarán de volar a la isla caribeña.
La inesperada decisión se atribuye al recargo que RD aplica al precio del combustible de aviones.
Por ello, Marranzini manifestó que «aún persisten retos en la industria de viajes y turismo local, como el alto precio de los hidrocarburos y la conectividad aérea».
No obstante, confía que «con la creación de nuevas rutas aéreas que conectan a República Dominicana con potenciales mercados emisores de turistas de latinoamérica provocaría el flujo de pasajeros que contribuye a mayor generación de divisas y nuevos puestos laborales».
Para cumplir con el cometido, se recuerda que Arajet tiene una potente apuesta de atraer turistas y convertir a Santo Domingo en un hub de conexiones por las rutas que opera y las que inaugura, como la reciente a Ciudad de México.
Además, la dominicana Air Century ha solicitado un permiso especial para operar 10 rutas directas y regulares desde Punta Cana para conectar con ciudades de Cuba, Aruba, Curazao, Saint Marteen, Colombia, Puerto Rico, Venezuela, Jamaica, entre otras.
En tanto, Equair solicitó permiso de operación a República Dominicana para la ruta Quito y/o Guayaquil-Punta Cana y viceversa, con hasta en diez frecuencias semanales.
De seguir las proyecciones el mercado de América Latina sostendría el sector hasta que se recupere el mercado europeo.